Jesús Cuevas, alcalde de Cillorigo de Liébana: «La espina que tengo clavada es hacer un complejo deportivo en condiciones»

Jesús María Cuevas Monasterio (Ojedo, 1957) siempre ha estado vinculado al deporte, pues se dedicó a jugar al fútbol durante varias décadas. Su vida cambió a falta de un mes para las elecciones de 2003, cuando le propusieron ser cabeza de lista del Partido Popular en Cillorigo de Liébana y aceptó «por ver lo que pasaba».
Para él la política se ha convertido en «una forma de vivir un poco distinta» en la que «conoces lugares y gente que, si no es por el cargo, no les conocerías (diputados, senadores, presidentes del Gobierno, los Orujeros Mayores…).
«En la política entras y te engancha. Siempre he tenido el apoyo de los vecinos y hasta ahora», señala, aunque también admite que no esperaba permanecer en ella tanto tiempo. «En un Ayuntamiento tienes mil cosas que hacer. Cada día era un pueblo que faltaba por asfaltar, en otro las luminarias, en otro la pista de pádel…», detalla. Aún así, Jesús procura «olvidarme de los temas del Ayuntamiento» cuando concluye la jornada laboral y «sigo yendo con los amigos a tomar el vino y a jugar al pádel o a futbito».
Cillorigo de Liébana es uno de los municipios de la comarca al que menos le afecta la despoblación, pero también uno de los que más sufre los ataques del lobo. Sin embargo, la pasión de Jesús por el deporte hace que «la espina» que aún tiene clavada nada tenga que ver con ninguno de esos asuntos. A su parecer, la «obra primordial» que le falta a Cillorigo es «un complejo deportivo en condiciones», con pistas de pádel y tenis, piscina, parque infantil, un bar, y espacios para bicicletas y patinetes.
¿Estaría a favor de un único Ayuntamiento comarcal?
Yo creo que tiene más contras que pros. El Fondo de Cooperación Local pasaría de un millón de euros entre todos los ayuntamientos a 250.000 euros siendo uno; para cualquier obra que pidamos, no es lo mismo ir como un ayuntamiento que como siete; y un ayuntamiento solo no daría a basto con un secretario y tres administrativas para todo el papeleo que exige la administración, sería imposible.
¿Qué balance hace de esta última legislatura?
Esta legislatura se va a recordar por la COVID-19, porque nos ha llevado dos años de la legislatura paralizados: no se podía pedir a Santander, casi todo era teletrabajo…
¿Cómo valora la gestión que se hizo desde el Ayuntamiento para combatir la COVID-19?
Se hizo una asociación de Protección Civil que desinfectó las farmacias, residencias y aceras prácticamente a diario, hubo asociaciones de vecinos que colaboraron haciendo mascarillas, gorros y trajes, hablamos con la farmacia para llevar medicación a las casas… y el 80% de todo eso lo ha hecho Protección Civil.
Era una época muy difícil. No podías pedir mascarillas porque las que había eran para los sanitarios y estaban a unos precios prohibitivos. Era un mercado al mejor postor. Fue un poco de locos todo lo que pasó.
¿Qué acierto o error del Ayuntamiento destacaría en estos cuatro años?
Ahora mismo tenemos un millón de euros para obras: nos acaban de conceder 315.000 euros para cambiar los 17 pueblos a LED; tenemos 330.000 euros para hacer obras en las zonas que tienen Parque Nacional, por ejemplo asfaltar Cabañes, ampliar un camino en San Sebastián, reparar el depósito de aguas en Bejes…
¿Hay algún proyecto que estuviera previsto y haya quedado pendiente de ejecución?
La espina que tengo clavada es hacer un complejo deportivo en condiciones, que tenga pistas de pádel y tenis, piscina, parque infantil, algo de bicicletas y alguna cosa para patinetes. Ya estamos mirando alguna finca en la Junta de San Sebastián con un mínimo de 5.000 metros. Yo quiero que cuando acabe la legislatura, como mínimo, tener la finca comprada y el proyecto hecho.
En verano habrá que poner un pequeño bar para la gente que vaya allí y un sitio donde la gente que venga en verano pueda echar allí la mañana. Creo que en Liébana esa obra es primordial. Se echa mucho en falta. En verano, sobre todo la juventud, no tiene donde ir.
Otra cosa que creo que nos ha fallado es hacer un «parque empresarial». Que en Santander autoricen suelo rústico a construcciones que no sean solo ganaderas o agrícolas. Que la persona no tenga que ir a los bajos de un edificio porque no le dejan en suelo rústico. Eso es algo incomprensible. Aquí tenemos el caso del antiguo matadero, que están las naves construidas y se ha intentado que cambien el uso pero no dejan.
El Plan de Sostenibilidad Turística contempla una decena de actuaciones en el municipio. ¿Qué falta por hacer?
Para el acondicionamiento del mirador en el Habario de Pendes ya está hecha la memoria a falta de algunos permisos; el acondicionamiento de una senda en Peña Ventosa lo estamos mirando porque es complicado, yo creo que ese proyecto se va a caer; y el descenso en bicicleta de montaña en Lebeña no lo han autorizado.
Se han puesto luminarias en el paseo desde la oficina de turismo hasta el Centro de Interpretación del Parque, en Bejes y en la Quintana; el acondicionamiento de puntos de recogida selectiva de residuos está hecho; se ha comprado la finca y se ha hecho el proyecto para el aparcamiento de Ojedo; se ha llegado al acuerdo para comprar una finca en Bejes donde hacer un aparcamiento; ya tenemos los permisos para actualizar las zonas de escalada en Castro-Cillorigo y en Cobeña; y estamos pendientes de la ejecución de una vía ferrata en Pendes y en Bejes y de las autorizaciones para el descenso en bicicleta de montaña entre Pendes y Castro-Cillorigo.
También se hará en Pendes una senda para personas con problemas de movilidad.
¿A qué se van a destinar los 110.757 euros del Fondo de Cooperación Local que corresponden a Cillorigo de Liébana?
Siempre lo tenemos para mil cosas: un muro que se cae, una carretera que hay que hormigonar, para repasar caminos que están en mal estado… Imprevistos.
Ahora en Liébana tenemos restricciones para dar y tomar y no nos hace falta ninguna otra
¿Por qué rechazó Cillorigo la candidatura de Liébana para ser Reserva de la Biosfera?
Nosotros, todo lo que es el Parque, somos Reserva de la Biosfera. El caché que te da ser Reserva de la Biosfera en el extranjero ya lo tenemos. Creo que ahora en Liébana tenemos restricciones para dar y para tomar y no nos hace falta ninguna otra cosa de estas.
En teoría es una cosa que suena muy bien, porque al final yo estoy convencido de que cuando quieras ir a hacer leñas, ir con el ganado a pastos o cualquier tipo de actuación en suelo rústico, nos iban a poner muchas más pegas de las que ya ponen de por sí ahora.
El único que tiene competencia sobre el canal de Urdón es el Gobierno de Cantabria
El Gobierno de Cantabria, las entidades locales implicadas y la empresa Repsol se reunieron en 2021 para buscar una solución y evitar la eliminación de algunas estructuras anexas al canal de Urdón. ¿Cuál ha sido la solución?
Viesgo nos pidió tirar unos pasos que están en Cillorigo y vino un informe del Gobierno regional autorizando a tirarles porque están en muy mal estado y son peligrosos. Si nosotros decimos que no lo autorizamos y pasa algo, el responsable es el Ayuntamiento.
A raíz de eso se acusó al Ayuntamiento de autorizar que se tirase, cuando es suelo rústico de especial protección y el único que tiene competencia es el Gobierno de Cantabria.
Con los fondos europeos para las zonas del Parque Nacional, el Gobierno regional ha dejado 300.000 euros para recuperar la senda pero en una condiciones de seguridad más altas de las que tenía. Ahora mismo está en ese punto.
Si viene un proyecto, el Ayuntamiento lo que hará será agilizar lo máximo posible las licencias y los permisos e intentar ayudar a que se haga. Es una senda preciosa para hacerla, pero tal y como estaba diseñada era para gente especialista.
La Dirección General de Patrimonio y Memoria Histórica anunció que se realizarán trabajos de localización y, en su caso, de exhumación, de una fosa en Cillorigo de Liébana. ¿Se ha avanzado?
Lo que sé es por la prensa, pero al Ayuntamiento no se han dirigido para nada. No tengo ni idea de dónde es ni de qué familia.
Potes y Cillorigo somos los únicos ayuntamientos de Liébana con perspectiva de crecer
¿Cómo afronta el Ayuntamiento el problema de la despoblación?
Cuando entré en el Ayuntamiento teníamos unos 1.020 habitantes y ahora tenemos 1.400. Si el Plan General que había en vigor no lo hubiese echado abajo el Supremo, ahora seguramente estaríamos con 2.000 habitantes o más. Había más suelo urbano y ya estaba en mente haber construido viviendas de protección oficial, chalets, vivienda familiar…
Si juntamos que el Plan General te deja solamente construir en lo que era urbano y que en suelo rústico no te dejan hacer un taller mecánico o de carpintería porque no te permite un cambio de actividad que no sea agrícola o ganadero, pues es muy difícil que crezca.
Hay mucha segunda residencia y la gente está censada en otra parte, pero creo que Potes y Cillorigo somos los únicos ayuntamientos de Liébana con perspectiva de crecer, no vamos a ir para atrás. Cuando vienes a comprarte una casa busca un sitio que esté cerca de Potes u Ojedo, que es donde está la vida, y que tenga los servicios que tiene que tener: alumbrado, saneamiento, al poder ser un parque donde llevar a los críos…
En Cillorigo se desarrolla un Taller de Empleo de hostelería pero continúa habiendo muchas ofertas de trabajo en la comarca dentro de este sector. ¿Los alumnos encuentran trabajo cuando terminan el curso?
Llevamos 10 años con un Taller de Empleo para personas en situación de desempleo donde se les da una especialización para poder trabajar en residencias, servicios sociales, hostelería o en actividad forestal.
Los últimos años el 30% o 40% de la gente que ha venido a hostelería han acabado trabajando. Es verdad que la mayoría ya ha trabajado y viene a profesionalizarse. Muchos de los que han hecho el taller están ya fijos en plantilla.
Ahora en Cillorigo tenemos unas 50 personas en nómina trabajando entre el Servicio Cántabro de Empleo (EMCAN), el Taller y todos los del ayuntamiento. Yo creo que eso ayuda un poquitín a que la gente pueda subsistir y pueda seguir viviendo.
Una vez que acabas con la ganadería, acabas con los pueblos como son ahora
¿Cómo afecta la presencia del lobo en Cillorigo de Liébana?
Es un tema sangrante. Hace unos daños terribles. En Bejes son auténticas matanzas para los que tienen ovejas. Ha afectado siempre pero va en aumento. Que el lobo pueda campar a sus anchas, que ya está campando, es un sinsentido.
Yo creo que no hay ganadero en Liébana al que el lobo no le haya matado ya ganado en los últimos años. Hace 20 o 30 años era una cosa esporádica. Igual en los Picos alguna oveja, pero aquí abajo en la vida habían atacado los lobos.
Creo que en unos años lo que está haciendo ahora el lobo lo va a hacer el oso. Antes estaba en los altos y no se veía, pero ahora casi toda Liébana ya ha visto al oso, y muchos con buenos sustos.
¿Cuál es la solución?
La primera y la más rápida es cambiar el Gobierno en Madrid. La segunda es en los tribunales. Parece que Europa ha dicho que hay zonas donde el lobo hace especial daño y que hay que hacer algún tipo de control y están en ello ahora. La solución pasaría por el control, puede ser con los guardas, con cacerías o con lo que sea, como se hacía hasta hace unos años. Era una forma de mantener al lobo lejos de los cascos urbanos por lo menos.
Si no, acaba con la ganadería y, una vez que acabas con ella, acabas con los pueblos como son ahora. Los praos se hacen monte, se hacen barda, y el paisaje de Liébana que ahora mismo es muy apreciado por todo el mundo va a cambiar. Hay pueblos que ya están prácticamente deshabitados y dentro de unos años van a ser auténticas ruinas con maleza por todas partes.
¿Se va a presentar como candidato a la alcaldía de Cillorigo de Liébana en 2023?
Hasta ahora no he pensado en dejarlo, pero ahora lo estamos sopesando. Yo creo que voy a seguir una legislatura más, por lo menos para que al que venga detrás le de tiempo a formarse para cuando yo me retire.
Si me presento es para aguantar toda la legislatura. Quizá el puesto de alcalde se lo dejaría a otro, pero seguiría como concejal.