Jesús Fuente, alcalde de Cabezón de Liébana: «Cuando el partido que hay en Santander no es de tu color siempre estás a la cola»

Jesús Fuente Briz ‘Chucho’ (Cabariezo, 1960) recorría Europa en camión cuando un problema de salud le obligó a dejar el sector del transporte y volver a Liébana. Tiempo después de haber presidido la Junta Vecinal de Cabezón de Liébana, ‘Chucho’ (Partido Popular) se hizo con la alcaldía del municipio en 2011.
Nunca pensó en dedicarse la política y, además, «siempre había dicho que un alcalde debe estar cuatro años para coger el hilo y otros cuatro para desarrollarlo», pero «te engancha». La familia es su único motivo para plantearse dejar su actual forma de vida, puesto que «no es igual ser alcalde en una ciudad grande que en un sitio pequeño, porque te llaman un sábado por un problema y tienes que solucionarlo». «Al final estás 24 horas, festivos y todo», apunta.
Aunque Cabezón de Liébana no es de los lugares más turísticos de la zona, el citado sector se ha convertido en los últimos años en la principal apuesta a futuro de un municipio que a día de hoy «vive de subvenciones». En cambio, Jesús señala que el acceso a algunas de ellas es imposible a causa de la diferencia de color entre las administraciones: «Cuando el partido que hay en Santander no es de tu color siempre estás a la cola».
¿Estaría a favor de un único Ayuntamiento comarcal?
No. No se va a ahorrar prácticamente nada, las subvenciones iban a ser menores porque cada uno tiene la suya, y la más importante, que la sede del ayuntamiento tendría que ser Potes y no es lo mismo tener un problema en Cahecho y bajar aquí que a Potes.
Aquí hay menos gente y se la atiende en el acto. Concentrado todo en Potes, con 5.000 habitantes, seguro que tendrían que volver otro día. Lo que tengo muy claro es que la gente no iba a estar igual de atendida que ahora.
Económicamente no sé que ventajas se podrían tener, porque del Fondo de Cooperación Local cada Ayuntamiento cobra una pasta y si fuera uno solo se cobraría menos.
La política es la política
¿Qué balance haría de la legislatura?
No me puedo quejar respecto a los trabajos que se han hecho. Creo que ha sido bastante buena.
He pedido subvenciones al Gobierno regional que no me han dado. Tampoco he entendido muy bien por qué. Pero bueno, la política es la política y cuando el partido que hay en Santander no es de tu color siempre estás a la cola. Se nota y mucho.
¿Qué acierto o error del Ayuntamiento destacaría en estos cuatro años?
Errores seguramente más que aciertos. Pero aciertos también hemos tenido alguno.
Por ejemplo, poner en valor la Ermita Rupestre de Cambarco, el mirador de Cahecho que se hizo muy bonito, lo que se va a hacer en la Iglesia de Piasca que va a ser un gran atractivo para el Ayuntamiento…
Yo creo que son aciertos porque aquí directa o indirectamente ya se vive del turismo, eso está claro. Hay que enfocarlo todo al turismo, a que la gente venga y se quede porque hay muchas casas de labranza, pequeños hoteles y apartamentos. Es lo que va a funcionar aquí.
En la ganadería ya quedan cuatro ganaderos, que lo tienen muy bien y hay que mirar por ellos porque el día que falten a ver qué va a ser de todo este entorno, porque las fincas se están perdiendo todas y va a ser todo un bosque.
¿Cuándo comenzó Cabezón de Liébana a obtener relevancia en el ámbito turístico?
Ya hace años que se va cogiendo esa línea porque se empezaron a hacer apartamentos y casas rurales, pero últimamente está más fortalecida. Igual en apartamentos somos los segundos de Liébana en plazas.
¿Hay algún proyecto que estuviera previsto y haya quedado pendiente de ejecución?
El primer año que estuvimos en el Ayuntamiento peleamos por hacer una fábrica de pellet para toda la masa forestal que tenemos aquí y que se está perdiendo. Hubiese sido muy bueno para Liébana, pero era un montón de dinero que para nosotros sería imposible. Se lo pedimos al Gobierno de Cantabria, se hizo un pequeño estudio y ahí se quedó. No se hizo por un tema económico. Estaría valorado en más de un millón de euros. Era un proyecto muy ambicioso.
También me hubiese gustado cambiar toda la cubierta del Ayuntamiento y arreglar el piso de arriba, pero me lo han echado para atrás tres años seguidos. No hay forma de sacar una subvención.
¿Piensan retomarlo en algún momento?
Lo veo tan difícil… Aquello fue una cosa por la que tenías inquietud a ver si esto podría prosperar, pero cuando llegas allí y te lo echan para atrás, insistes y te dicen que no… Pues ya dejas el proyecto porque ves que es inviable, que tú desde el Ayuntamiento no lo puedes hacer porque no llegamos a 600 vecinos con un presupuesto de 650.000 euros. ¿Dónde vas? Imposible. Aquí vives de las subvenciones.
¿Cómo valora la gestión que se hizo desde el Ayuntamiento para combatir la COVID-19?
Fueron dos años muy duros, sobre manera el primero. Desde el Ayuntamiento estuvimos cercanos a los vecinos en todo momento para las necesidades que tenían. Les dimos el teléfono del Ayuntamiento y el mío personal para cualquier problema (comida, medicamentos, ir al médico…). Hicimos lo que los vecinos pedían. Nos pusimos a su disposición. No podía ser de otra manera porque aquí la gente es muy mayor y algunos no tienen un vehículo para bajar.
El Centro de Interpretación del Románico de Piasca es el más importante del Plan de Sostenibilidad Turística
¿Se han ejecutado los proyectos previstos para Cabezón de Liébana en el Plan de Sostenibilidad Turística?
La renovación del alumbrado público de Cahecho, Cambarco y Piasca y la iluminación de la Iglesia de Piasca, el mirador de Cahecho y la Ermita Rupestre de Cambarco ya está hecho; el proyecto para el acondicionamiento de varios puntos de recogida selectiva de residuos se va a presentar a la Mancomunidad para que lo liciten; y el Centro de Interpretación del Románico de Piasca, que es el más importante del Plan y en el que se va a invertir 130.000 euros, está ya adjudicado.
El proyecto del Centro consiste en habilitar una zona que está junto a la Iglesia. Me gustaría que todas las figuras y el material que tiene el Obispado en Santillana del Mar, que mucho de ello según me han dicho está guardado y ni se ve, se expongan ahí y hacer visitas. Yo creo que puede funcionar porque a la gente le gusta ver esas cosas.
¿A qué se van a destinar los 90.641 euros del Fondo de Cooperación Local que corresponden a Cabezón de Liébana?
Lo repartes en pequeñas obras como arreglar un camino con cemento, porque 90.000 euros cuando empiezas a hacer una obra no da para tanto. Pero nos viene muy bien, porque tampoco te dicen en qué tienes que hacerlo.
¿Cómo afronta el Ayuntamiento el problema de la despoblación?
Es un tema tan complejo y tan difícil que desde el Ayuntamiento es imposible. ¿Qué puedes hacer? Para fijar población lo primero es tener puestos de trabajo y el Ayuntamiento da lo que da.
Han venido cuatro que dicen que trabajan desde casa con la fibra. A ver si es verdad que con la fibra fijamos población. Mejorar, los pueblos van a mejorar un montón, pero no va a venir gente como para volver a tener Cabezón de Liébana más de 1.000 habitantes.
Uno de sus objetivos en esta legislatura era terminar de asfaltar todos los pueblos. ¿Lo ha logrado?
Van a quedar dos porque ya se les echó hormigón hace muy poco, que son Buyezo y Cambarco. Para la próxima, si seguimos, los echaré.
En marzo se reunió con el consejero de Desarrollo Rural y hablaron sobre la renovación del vial entre Cabariezo y Cabezón, así como del camino rural entre San Andrés y Perrozo. ¿Se consiguió llevar a cabo?
Nada. Fuimos y en eso se quedó. La petición quedó ahí pero nada más.
Ahora mismo tenemos más problemas con los osos
¿Cómo afecta a Cabezón de Liébana la presencia del lobo?
Lo que no es normal es que los lobos bajen a matar ovejas aquí, a menos de 50 metros de las casas. Y los osos en el tiempo de las cerezas estaban todas las noches en el camino de Cabezón a Cabariezo. Los cerezos que hay en las fincas de aquí arriba los rompieron todos. No queda ni uno.
Esto ha sido en los últimos años. En Lameo siempre hubo osos. Cuando decían que no había, en Lameo los había porque los veían. Pero por aquí no se habían visto nunca. Ni los lobos. Es el mundo al revés. Ahora vas arriba y no ves a los osos, están aquí abajo, donde tienen la comida fácil.
El otro día nos reunimos el alcalde de Pesaguero y yo con el presidente de la Fundación Oso Pardo para ver qué se podía hacer. Él proponía varias cosas, por ejemplo limpiar los alrededores de los pueblos, quitar toda la maleza y plantar ciruelos y cerezos en las zonas más altas para que coman allí y no bajen a los pueblos. Me parece bien que lo hagan.
Ahora mismo tenemos más problemas con los osos. En Yebas están matando cabras y ovejas. Pero los lobos también hacen daño. Hace poco mataron ovejas en Buyezo.
¿Cuál es la solución?
La tengo pero no la puedo decir.
¿Se va a presentar como candidato a la alcaldía de Cabezón de Liébana en 2023?
Sí, lo tengo decidido. Lo tenía en dudas hasta hace bien poco porque con 12 años ya voy cuatro años pasado.
Yo creo que hay gente joven que se puede presentar y tendrá otras miras e inquietudes, como cuando yo entré. Otra visión, ni mejor ni peor. Lo que pasa es que la juventud no quiere mojarse y seguro que sus ideas serán mejores que las mías. Pero no quieren.