Cantabria establece una nueva Ley de Protección y Bienestar animal

El consejero de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Guillermo Blanco, ha presentado el anteproyecto de Ley de Protección y Bienestar Animal que sustituirá la actual normativa «vigente desde 1992 y totalmente obsoleta», para «lograr un nivel de protección adecuado a la evolución de la sensibilidad de la sociedad cántabra hacia los animales».
La nueva normativa contempla un mayor régimen de infracciones y sanciones.Así, las infracciones muy graves (maltrato, abandono…) estarán tipificadas con hasta 60.000 euros de multa.
El documento podrá recibir aportaciones y sugerencias durante el periodo de información pública, que se inicia este viernes 22 de enero, por un periodo de 10 días hábiles.
Ley de Protección y Bienestar Animal
Como novedad, se incluye la regulación de la recogida y mantenimiento de los animales extraviados o abandonados para que sean adoptados a través de la implantación de programas de acogimiento en casas particulares o de acogida.
También establece que las condiciones de cría de animales de compañía con fines comerciales, su venta, donación y publicidad sólo podrá efectuarse desde centros de cría o de venta registrados, la posibilidad de la gestión de los gatos abandonados mediante el mantenimiento de colonias urbanas felinas por parte de los ayuntamientos, y la posibilidad de que los animales de compañía en general puedan acceder a lugares y transportes públicos -con la autorización del propietario o responsable-.
Según el consejero, el nuevo documento reforzará el papel de las asociaciones y entidades de protección y defensa de los animales y el de los centros veterinarios en las actividades de formación y divulgación para el fomento de la protección en los programas de acogimiento y en su participación activa en la adopción.
Además, Blanco ha anunciado la creación de la Mesa de Protección y Defensa de los Animales como órgano consultivo y de asesoramiento de la Consejería, con la participación activa de los agentes implicados, y el deber que establece la nueva ley de que las administraciones publicas contribuyan a la divulgación, información y educación en materia de protección y bienestar animal.
Asimismo, se implantarán otras medidas como la fijación de competencias municipales y autonómicas en la materia, protocolos de actuación en caso de urgencia ante la existencia de riesgo para los animales y la posibilidad de crear un servicio de vigilancia y control para actuaciones de rescate, o la recogida y el transporte de animales en situaciones de riesgo o abandono.
El objetivo es fomentar y promocionar una mayor conciencia social sobre las necesidades de los animales de compañía, de los requerimientos que exige su tenencia responsable y la gestión ética del abandono de los animales, así como la divulgación sobre el papel beneficioso que tendrá en la sociedad.