Las mascotas son bienvenidas en los albergues de peregrinos: «Mi perro es el primero que está aquí»

Cada 21 de julio se celebra el Día Mundial del Perro como homenaje al amor incondicional y a la lealtad de este animal, del que siempre se ha dicho que es «el mejor amigo del hombre». Los albergues de peregrinos de Liébana son conscientes de que cada vez son más los amantes de estos animales que no quieren dejarles atrás y prefieren llevarles consigo allá donde vayan. Por ello, la mayoría de estos siete albergues permiten su entrada a las instalaciones.
El albergue municipal de Cades, bajo la dirección de Erika Chamero desde 2017, siempre ha admitido la entrada de mascotas. «Mi perro es el primero que está aquí», ha afirmado Erika, quien considera esta posibilidad como «un efecto llamada» para otros peregrinos, puesto que en los últimos cinco días «ya han venido seis perros». Además, este reclamo alcanzó una mayor popularidad gracias al programa de Jesús Calleja, ‘Volando Voy’, grabado en el Valle de Liébana en 2019.
No obstante, Erika también tiene en cuenta a quienes no quieren compartir su espacio con estos animales, por lo que ha acondicionado la habitación de la zona superior del albergue para que las mascotas no tengan que pasar por las zonas comunes.
En la misma línea actúa el albergue de Potes, que actualmente se encuentra cerrado y en evaluación para su reapertura, debido a la nueva normalidad. Hasta ahora, el alojamiento contaba con una de sus seis habitaciones acondicionada para las mascotas de los peregrinos, aunque estas no podían permanecer en las estancias comunes, según ha explicado Pilar Gómez, directora del Centro de Estudios Lebaniegos y del museo Torre del Infantado.
Los albergues de La Fuente y de Cicera también admiten la pernoctación de mascotas junto a sus dueños, todo lo contrario que el albergue de Serdio, cuya responsable desde hace 13 años ha sido tajante al manifestar que en este alojamiento no se admite la estancia de mascotas, ya que «siempre acaban en la cama». El albergue de Santo Toribio tampoco acepta animales en sus instalaciones. Por su parte, el albergue de Cabañes no se ha pronunciado al respecto, ya que su responsable ha anunciado el cierre definitivo.